No pinta nada bien el día por el camino, y no para de llover. Comenta Loli que como está el día, no cree que nos den la salida, (mi mujer no tiene ni idea de lo locos que estamos). Pasado Ardales deja de llover, ¡BIEN!, aunque se ve todo empapado, el tomar la salida sin que llueva es un buen síntoma, después que pase lo que tenga que pasar.
Me puse bueno de barro nada más salir, en cuanto pasamos por delante del Súper Sol la gente parada delante del primer charco que había nada más empezar los carriles, yo sabía que más tarde o temprano no íbamos a rebozar en barro, así que tire por medio y empecé a baña a la gente, hubo de todo quien me dijo que con dos "cajones" y quien se acordó de mi familia, pero esto es mtb el que no se quiera manchar que se quede en su casa. Una bajada la tuve que hacer a pie por la aglomeración de gente que se bajó, la parte dura de la Ermita impracticable, asfalto hasta el cuartel de la legión, luego una subida por asfalto bastante buena y larga, (puerto el Monte), el resto carriles con muchos hoyos y por tramos mucho barro. No me cebe en ningún momento, y fui guardando fuerzas para el final. Termine muy entero y fuerte, al final en meta hice un tiempo de 04:48:56, media de 14,33 km/h, clasificación provisional 410 de 1778, y 85 de 173 en Master 40. Vi muchas averías de cadenas partidas, cambios doblados y bastantes caídas. Las bajadas estaban muy peligrosas, (la cuesta del cachondeo y la bajada de la ermita), los adoquines mojados resbalaban muchísimo, y el barro convirtió el recorrido en una pista de patinaje, había sitios que daba pedales y no avanzaba por que la rueda trasera patinaba.
En resumen una nueva gran experiencia para contar a los nietos.
José María "Farma"
El roce no hace el cariño
El roce hace rozaduras
