Moclinejo y la Axarquia

El que mas y el que menos, ya tena ganas de que llegara el fin de semana para reunirse con los compañeros, y compartir magnifica jornada de ciclismo.

En número de 35 contados al vuelo, se emprendió la marcha hacia la dificultad montañosa de la jornada, (alto de Moclinejo). Agrupados hasta el Rincón de la Victoria con los consiguientes cortes por los semáforos, y una vez tomados el desvío, ya en las primeras rampas  se hacen los habituales grupetos.
Los escaladores del grupo se marcharon a ritmo infernal, el grueso del grupo ascendió a bloque también imponiendo un ritmo que fue sacando de punto a más de uno, los que marchaban por detrás a ritmo más asequible, podían comprobar a lo lejos como se iban descolgando. Después de esperar a reagruparnos en el alto, se decide alargar la ruta pues según calendario se daba la vuelta y se volvía a Málaga. Algún compañero avisa de que no continúa y se dan la vuelta, el resto decide continua hacia Vélez-Málaga y Torre del Mar. Después de la bajada del muro de Almachar se vuelve hacer reagrupamiento y nos avisan por teléfono que los últimos en llegar no bajan y se dan también la vuelta, (por favor, para la próxima vez un poco de organización). Susto de un conductor con coche rojo a Jesus Orca. Llegada a Torre del Mar a ritmo fuerte y parada a desayunar. Se reparar un par de pinchazos y emprendemos vuelta a Málaga. De nuevo se vuela favorecidos por la brisa a favor y se alcanzas velocidades que rondan los 45 km/h. Los que se volvieron dieron cuenta de la tradicional parada en el CDR. El compañero Quique en su regreso tuvo la fortuna de encontrar a dos profesionales de RadioShak que están entrenandoen nuestra tierra, Haimar Zubeldia y Markel.

Mi encuentro con dos pros

Vaya por delante que esto no es la crónica del sábado, sino el relato de una experiencia que tuve ese día, a la vuelta de la salida con el club.

Mi mujer está en las últimas 2 ó 3 semanas de embarazo, y como el domingo íbamos a dedicar el día a las últimas tareas del cuarto de la niña, el sábado me comentó que quería ir a comer a una venta. Para ello, y para que no se ponga nerviosa, tenía que estar en casa a las 12:30 aproximadamente. En la cima de Moclinejo estábamos a las 10:50, y haciendo cálculos, pensé que no me daba tiempo si seguía con el grueso del club hasta Vélez, por lo que volví por mis pasos. El hotel de Moclinejo estaba cerrado, con lo que paré a tomar el café en Las Flores, en el Paseo Marítimo de Rincón, como un dominguero más.

A los 15 o 20 minutos, emprendo la marcha hacia Málaga, sabiendo que llegaba a buena hora. En éstas estaba subiendo el repecho de El Cantal, cuando se me unen por detrás dos cicloturistas, y acordamos ir los tres juntos hasta Málaga. Y de repente, una vez descendidos del repecho y antes de la rotonda con semáforos y de la iglesia de La Cala. Veo que a lo lejos, a dos Radioshacks. Todo equipados. Equipación nueva. Flamantes Trek Madone y zas!!!. A por ellos que vamos los 3. Echando un poco los higadillos, les pillamos. Me pongo por atrás a ver quiénes eran, y en éstas estaba a punto de preguntarles en inglés (lo más lógico, la verdad), cuando en el costado del que iba segundo veo "Haimar" y la ikurriña, y en el primero, “Markel”. ¡Hombre!. Me iba a ahorrar el inglés a 150 ppm, jejeje. Entonces, quedando como Dios, le pregunto: "Hola, ¿eres Haimar?". Una vez visto la cara si que le reconocí, pero la verdad es que por detrás, se me hacía difícil. Por detrás podía ser hasta Frank Schleck.

Ya fuimos hablando todo el rato, muy majos los dos, aunque más charla he llevado con Zubeldia. Hemos hablado de cantera (le he hablado de Víctor), algo de materiales, de como entrenan, de por dónde habían ido los días anteriores por Málaga, etc (por si interesa, el sábado fueron hasta lo que el cree que es Nerja, y el jueves subieron un poco el puerto de El León). Todo ésto mientras iba a 150 ppm, y atravesando Málaga a 40 km/h, por las calles que solemos ir a veintipoco. Me han ido comentando que aunque la vuelta empieza en San Fernando se han venido a Málaga por las conexiones de vuelos, ya que Bilbao-Málaga hay directo, y hoy estaban entrenando por aquí. Llevaban ya unos días, desde el jueves creo que me dijeron. Esa misma tarde de sábado les recogían en el equipo y se los llevaban a Cádiz. Les he deseado suerte para la Vuelta a Andalucía y les hemos acompañado a su hotel, el Monte Málaga (encima al lado de mi punto de giro para casa).

Llegué a casa emocionado porque la verdad no hay muchas ocasiones de compartir entrenamientos con profesionales. Rodar con Carlos Miura, con todos mis respetos, no es lo mismo, y echar un rato con Haimar y Markel, aunque ellos fuesen a 90 ppm y yo a 150, esta de miedo.

Así que bueno, ya sé que se puede pillar la rueda y aguantarle a un pro... ¿o no?